Una alternativa eficaz para lograr el desarrollo de competencias directivas, radica en proporcionar a los ejecutivos un apoyo externo personalizado de alguien en quien pueda confiar, que esté capacitado técnica y personalmente para escucharlos y servirles de “caja de resonancia” de manera que ellos mismos encuentren el camino de salida hacia la continuación de su desarrollo personal y profesional.